¿Quieres vender tu casa? ¡Despersonalízala!
Evita las fotografías personales en la decoración.
Decoración despersonalizada
Antes de abrir la puerta a los primeros compradores potenciales de tu piso es importante tener en cuenta algunos detalles referentes a la puesta a punto de la vivienda. Y es que además de mantenerla limpia y ordenada, puede resultar interesante que despersonalices la decoración. Como agencia inmobiliaria en Empuriabrava y Rosas, creemos que hacerlo contribuye a que el proceso de compraventa sea más rápido y beneficioso.
Recuerda, ya no es tu casa
Desde el mismo momento en que decides contactar con un agente de la propiedad para poner tu piso de Empuriabrava a la venta te aconsejamos que cambies el chip. Es decir, que tomes conciencia de que la vivienda que habitas se ha convertido en un producto inmobiliario que ha entrado en el mercado con el objetivo de venderse. Y para ello, lo primero que tienes que hacer es revisar cada una de las habitaciones en busca de todos aquellos objetos que se pueden considerar personales.
¿A qué nos referimos? Principalmente, deberías eliminar las fotografías personales. Y es que no hay que perder de vista que si fuéramos nosotros el comprador y entrásemos en una vivienda llena de fotos en las que aparecen sus moradores con sus amigos y familiares, difícilmente podríamos hacernos a la idea de que esa casa podría ser la nuestra.
No se trata de vaciar tu piso sin más, si no de dejarlo totalmente desprovisto de aquellos detalles que lo convierten en un “hogar”.
Con esto no nos referimos a un interiorismo anodino, soso y carente de estilo y originalidad. Nada más lejos de nuestra intención. Un buen ejemplo que te puede servir de guía puede ser la decoración de las habitaciones de un hotel. Obviamente, en este tipo de estancias no encontraremos la foto de ninguna pareja celebrando el día de su boda o la de alguien con su retoño en brazos, sin embargo, nadie pone en duda que muchos de estos establecimientos han sido decorados con muy buen gusto con el fin de que sus huéspedes se sientan “como en casa” por unas horas.
Así que recuerda mantener ocultos o deshacerte por completo de todos aquellos objetos susceptibles de recordarle a tu posible comprador que esa casa todavía está ocupada o de hacerle sentir como un extraño que irrumpe en la vida cotidiana de una familia.
Como decíamos, las fotos son, sin lugar a dudas, lo más personal que podemos utilizar como decoración. Sin embargo, hay otros muchos elementos que también dejan entrever los gustos y aficiones personales de la persona o la familia que vive ahí. Por ejemplo: ¿quién no tiene algún imán pegado en la nevera que ha comprado en sus vacaciones o le han traído como souvenir en uno de los viajes de un amigo o familiar? Y quien dice un imán, dice el póster de una ciudad o una figura decorativa típica de alguna ciudad, como la Sagrada Familia de Barcelona o la Sirenita de Copenhague. Hay muchos más objetos de los que nos imaginamos que hablan de nosotros y de la vida que llevamos o nos gustaría llevar.